Autor: Rómulo Betancourt
Título: Hacía la formación de técnicos
Fecha de publicación: 04-12-1937
Publicación: Diario Ahora


No puede menos que comentarse con simpatía la noticia, publicada por el Ministerio de Educación Nacional, de que el 7 de Enero próximo comenzará a funcionar en Caracas el Instituto de Administración Comercial y de Hacienda. Este Instituto se va a crear en cumplimiento de una resolución ejecutiva de fecha 8 de octubre pasado.
En la publicación oficial que se hace anunciando la apertura del Instituto en referencia hay un párrafo que vale la pena transcribir. Es éste: "La gran afluencia de personal extranjero que está presenciando el país, traído con el propósito de organizar técnicamente diferentes ramas del comercio, la industria, la banca, etc., así como algunos servicios del Gobierno nacional, se debe a la escasez que tenemos de personal preparado, ya que no puede negarse que la proporción de los verdaderamente capacitados está muy por debajo del nivel de la demanda".
Esta es una verdad inapelable. Nuestro país carece de técnicos en Economía, en Hacienda Pública, en Banca, en Comercio. Nuestra educación se resiente de vicios coloniales y tiende a formar "doctores" en profesiones liberales y no expertos en las ramas de la moderna ciencia social. Mientras en la totalidad de los países avanzados, y con una concepción actualizada de los problemas de la Nación, se ha establecido en las Universidades cursos en ciencias económicas, en Venezuela nuestra Universidad continúa siendo una fábrica de doctores en profesiones liberales. Los mismos cursos que se daban hace un siglo en la Universidad Central, apenas recién superada su etapa colonial de Seminario Tridentino, son los que se dan hoy: medicina, derecho, ingeniería, dentistería. Y mientras tanto, se importan técnicos en tejidos para ponerlos al frente de las empresas textiles; y expertos en estadística para confiarles la organización de los servicios estatales de esa índole; y corresponsales para las casas bancarias y comerciales, porque sólo un porcentaje reducido de venezolanos maneja idiomas extranjeros y tiene una cultura de expertos en cuestiones de índole bancaria o comercial.
Es un comienzo de rectificación de esa vieja educación escolástica, de tipo feudal y anticuada en un país donde ya apuntan características de moderna estructuración industrial y capitalista, la apertura del Instituto de Administración Comercial y de Hacienda.
La forma como se realizarán los cursos revela el propósito de que no sean sólo elementos salidos de las clases sociales pudientes quienes puedan frecuentar el Instituto. No se requerirá del título de bachiller para aspirar a la inscripción. Bastará poseerse el certificado de Instrucción Primaria Superior o sea haberse cursado hasta el Sexto Grado. Tratándose de adultos, que no poseen el certificado de Instrucción Primaria Superior, se les facilitará el acceso a los cursos mediante la presentación de un examen de admisión.
Los cursos serán de 4 años. En los dos primeros años, las materias son comunes para los aspirantes a los dos títulos que conferirá el Instituto: el Perito en Administración Comercial y el de Perito Secretarial. En los dos últimos años, que son los de especialización, se estudiarán materias diferentes según se aspire a uno o a otro título. Las materias que se cursarán en el Instituto son las necesarias para formar expertos en materias de economía aplicada: Aritmética Comercial, Historia de la Economía, Técnica Bancaria, Geografía Económica, Principios de Economía Política, etc.; y las que son indispensables en toda cultura general; Gramática, Francés, Inglés, Historia Universal, etc.
También harán los que vayan a especializarse en Administración Comercial estudios prácticos, en un gabinete Físico-químico ya adquirido por el Ministerio de Educación, sobre el manejo de los aparatos utilizados en las aduanas modernas para determinar la calidad y composición de los productos importados, a los efectos de una científica clasificación arancelaria.
Con el propósito de facilitarle la adquisición o mejora de sus conocimientos en Taquigrafía, Contabilidad y Cultura General a quienes no puedan asistir a los cursos diurnos, se creará también un curso nocturno, su duración será de dos años.
No puede menos de merecemos la más viva simpatía ese Instituto que se proyecta. Oportunidades nuevas tendrán de armarse para la lucha por la vida y de prestar servicios excelentes en la modernización de Venezuela, quienes allí estudien con ahínco y fervor. Muchos, que no sienten aliciente por las profesiones liberales, debido a la plétora de doctores en relación con las necesidades de nuestro medio, tendrán oportunidad para encauzar su interés hacia el estudio de ciencias económicas aplicadas.
Dos observaciones queremos hacer, sin embargo. Son éstas:
1- El propósito del Ministerio de Educación de formar peritos en ciencia económica aplicada debe ligarse con una enérgica actitud del Ejecutivo en la aplicación de lo estatuido en la Ley de Trabajo con respecto al porcentaje de técnicos extranjeros que pueden ser ocupados para adquirir un título de experto comercial si continúa la situación actual, en que las compañías petroleras y otras de extracción extranjera publican avisos solicitando técnicos venezolanos y luego los rechazan alegando que les prestan mejor servicio los americanos o ingleses por ellas importados. El estricto cumplimiento de la Ley de Trabajo, en el sentido de no permitirle a las compañías y empresas tener más técnicos extranjeros a su servicio de los autorizados por aquella Ley; será incentivo para el venezolano que quiera adquirir un diploma en el Instituto próximo a abrirse.
2- Dice el Comunicado del Ministerio de Educación que tendrán acceso a cargos fiscales quienes adquieran el diploma de Perito en Administración Comercial. No creemos que baste con esa declaración informal. Es preciso que el Ejecutivo se auto-comprometa, por medio de una Ley que presente a las Cámaras en sus próximas sesiones, a garantizarle trabajo en las dependencias fiscales del Estado y estabilidad en sus cargos a quienes adquieran su título de Expertos en Administración Comercial. Algo semejante debe hacerse con respecto a los Estudiantes del Curso de Estadística. Y ello porque una lamentable experiencia nacional tiene convencidos a los venezolanos de que para cargos públicos, y muy especialmente para los pingües cargos fiscales, no se escoge a los más capacitados, sino, a los más ligados por los lazos de parentesco o amistad con los altos funcionarios de la Administración. Una Ley o Estatuto que proteja realmente el empleado público -tal como la vigente en México y la que está en vías de aprobación en las Cámaras Colombianas- son requeridas. Si no, pocos tendrán interés en estudiar una carrera para quedarse luego con el diploma colgado en la sala de su casa, mientras en las Aduanas y demás dependencias fiscales del Gobierno se emplean a ignorantes, escogidos en los rangos privilegiados de la parentela o círculo amistoso de los Ministros.