Autor: Rómulo Betancourt
Título: El panorama económico nacional en nada bonancible
Fecha de publicación: 12-08-1938
Publicación: Diario Ahora

En nuestro artículo de ayer enfocamos la situación económica del Táchira. Y demostramos, de manera irrebatible, que nada tiene de próspera ni de bonancible.
Deliberadamente escogimos para ese análisis pormenorizado al estado Táchira porque, como apuntábamos ayer, las más engañosas leyendas de prosperidad se han tejido alrededor de esa entidad federal.
Pero cuanto dijimos del Táchira, puede repetirse -con variantes de detalle- con relación al resto del país. Entre el pauperizado estado andino y los otros de la República hay, en cuanto a lo económico se refiere, diferencia de grado y no de esencia.
El Boletín de la Cámara de Comercio de Caracas (N° 295, junio de 1938) nos va a servir de guía para el rápido, panorámico vistazo que daremos a la situación económica nacional.
Esa revista tiene una acción de "informaciones del Interior", atendida por corresponsales especiales. Sus notas son escuetas, objetivas, sin intención preconcebida, que no puede suponerse en un órgano oficial de asociación como la Cámara de Comercio, marginada a las luchas políticas militantes. Hecho este necesario exordio, recorramos a las principales zonas comerciales del país, llevados de la mano por los corresponsales del Boletín.
En la entrega que citamos, se publican corresponsalías de las siguientes ciudades: Valencia, San Fernando de Apure, Barquisimeto, Tucupita, Río Caribe, El Tocuyo, Barcelona y Boconó.
El tono con que se expresan esos corresponsales, al enfocar la situación comercial y económica en general de las regiones desde donde escriben, puede apreciarse leyéndose los siguientes fragmentos de sus crónicas:
- Valencia, mayo 30. Nos informan tanto mayoristas como detallistas que sus ventas durante el presente mes han sido verdaderamente pésimas, pudiéndose calcular mucho menores que las de abril. Las primeras sufrieron una disminución de un 50% y un 25% las últimas.
- Barquisimeto, mayo 31. Analizando la situación mercantil en el mes de mayo, obtenemos un resultado desfavorable. Las transacciones comerciales son muy limitadas. Las ventas han estado pesadas y nótase dificultad para cumplir los compromisos. Hay poca circulación de dinero. Esta situación viene notándose desde hace varios meses atrás, y en este se ha acentuado más.
- Tucupita, mayo 31. El estado económico actual de esta región es pésimo. Se nota mucha paralización en todos sus sectores.
- El Tocuyo, junio 6. El mes de mayo, que acaba de pasar, fue de muy poco movimiento comercial en esta plaza. En cuanto a la situación agraria, como es sabido, la cosecha que acaba de pasar fue sumamente mala, hasta el punto de reducirse en algunos lugares a un veinticinco por ciento de las cosechas normales.
- Bocono, junio 24. Continúa la crisis económica en esta región, la cual se acentuará por motivo de estar al terminarse las existencias de café de la cosecha 1937- 1938, y por ende los negocios seguirán encalmados hasta la entrada de la nueva cosecha.
- Río Caribe, junio 12. Ningún otro pueblo de la República atraviesa una situación tan difícil como la que actualmente azota a Río Caribe, sembrando el temor entre sus moradores más optimistas y haciendo nugatorias las operaciones comerciales, que ayer no más constituían un bello exponente de las facultades financieras de esta tierra. La razón por la cual nos inclinamos a juzgar que lo que a nuestro pueblo le acontece es único entre los demás pueblos hermanos, se debe a que todas las calamidades que podamos imaginar, que de manera directa puedan afectar a un conglomerado social, se encuentran aquí reunidas como para obrar, en forma rápida y decisiva en la destrucción de nuestras fuerzas vivas.
Como podrá observarse, con la sola excepción de los informes de San Fernando de Apure y de Barcelona, los demás son realmente alarmantes. Y el de San Fernando de Apure no es revelador de que ahí exista una buena situación económica, sino de presunción de mejoramiento en la agricultura y la cría de llevarse a la práctica el Plan Trienal. El informe de Barcelona sí es optimista. El comercio ha cuadruplicado sus ventas. Las agencias Chevrolet y Ford establecieron sucursales allí. Los aviones de Pan American y la Aeropostal aterrizan a diario en la ciudad. Pero esta febril actividad económica obedece, única y exclusivamente, a la intensificada explotación petrolera en los yacimientos de >. Durará apenas lo que los trabajos de exploración, apertura de caminos y edificación de oficinas, casas de habitación y, campamentos. Después de este transitorio período de prosperidad artificial, quedará para Anzoátegui, pasados algunos años, lo que le ha quedado a Falcón, ahora que sus pozos están prácticamente agotados: unas cuantas torres de petróleo, inútiles, erigidas sobre desoladas tierras sin cultivos.
Hacemos estas referencias no para gozamos en ellas. Sino para dolernos, con dolor venezolano, de ellas. Y para reclamar, una vez más y con el mismo tono impaciente de otras veces, una política agrícola y pecuaria enérgica y creadora. Venezuela marcha, por la incuria y la miopía de quienes debieran sal varia, hacia abismos de bancarrota.