Autor: Rómulo Betancourt
Título: Trayectoria internacional de la Electric Bond y guía de la Venezolana de Electricidad
Fecha de publicación: 11-11-1938
Publicación: Diario Ahora

En nuestro artículo de ayer ofrecimos dar un rápido vistazo sobre las actividades internacionales del poderoso trust norteamericano, del cual es rama, o filial, esta empecinada Compañía Venezolana [?] de Electricidad.
La Electric Bond and Share es uno de los más gigantescos monopolios capitalistas. Uno de esos monstruosos organismos de explotación y dominio internacionales, creados por el capital financiero en su "última etapa". La concentración del capital cuya ley descubrió el más genial economista de los tiempos modernos- tiene en ese trust una de sus más caracterizados arquetipos. Basta decir, para apreciar su poderío inmenso, que para 1930 giraba por un capital activo de Mil millones de dólares.
La Electric Bond and Share ha lanzado sus tentáculos sobre todo el mundo, Y para ellos, ha organizado una serie de holding companies, compañías "tenedoras" de bonos y de acciones bajo el directo comando de la casa matriz. Una de tales compañías -la American & Foreing Power- tiene bajo su directo dominio a la empresa subsidiaria que opera en Caracas y en varios estados de la República. Esta compañía ha tejido la complicada tela de araña de sus concesiones leoninas y de sus negocios fabulosos, en casi toda América Latina y en el establecimiento internacional de Shangai (China). Para el 30 de septiembre de 1920, controlaba el servicio de fuerza y luz eléctrica en 724 ciudades de América y de Asia. "Sobre los métodos de explotación de estas compañías eléctricas -tanto del consumidor como del trabajador a su servicio- nos va a decir palabras decisivas el presidente Roosevelt. Cuando fue Gobernador de Nueva York, y ahora presidente de Estados Unidos, se ha enfrentado a los "piratas de la electricidad" y conoce bien sus trácalas. Escuchemos sus palabras aleccionadoras en esta interesante materia:
"La electricidad no es ya un lujo. Es una necesidad definitiva. Alumbra nuestras casas, nuestros sitios de trabajo, nuestras calles; hace girar las ruedas de nuestros transportes y de nuestras fábricas. Puede aliviar la tarea de la dueña de la casas y quitar un gran peso a las espaldas del agricultor. Pero no lo ha hecho todavía. Estamos atrasados en el uso de la electricidad en nuestros hogares y en nuestras fincas. En el Canadá, la casa de tipo común emplea doble fuerza eléctrica que la que nosotros usamos en Estados Unidos. ¿Qué nos impide usar este gran agente económico y humano? No es porque nos falte fuerza hidráulica, o provisión de carbón y petróleo. La razón por la cual no podemos aprovechamos de nuestras posibilidades, es que muchos intereses egoistas, que controlan las industrias de la fuerza motriz y de la electricidad, no han sido suficientemente presionados para que establezcan tarifas bastante bajas, que permitan su vasta difusion en el uso publico."
El mismo presidente Roosevelt, refiriéndose a los métodos de bucaneros que utilizan los holding companies eléctricos, escribió en otra parte: "Respecto a cifras, hechos y ejemplos definidos de robos, maliciosa información dada al público, sobornos y toda clase de abusos para vender acciones en conexión con los Holding Companies, la Comisión Federal de Comercio, en sus investigaciones respecto a los servicios públicos, puede proporcionar pruebas evidentes."
Y hay más todavía. Fueron tan escandalosos, por deshonestos y audaces, los métodos de acción de las compañías eléctricas norteamericanas, que incitaron a un escritor a denunciarlos en libro. El publicista yanqui Mr. Ernest Gruening, en su obra: El público paga, reveló, con documentos, cómo esas compañías han sobornado a la prensa, al foro, al púlpito, a la cátedra, a funcionarios públicos, para hacer pasar contratos favorables a sus intereses o para mantener intocados odiosos y pingües privilegios.
En América Latina, han acudido a todos los medios posibles, por extravagantes que parezcan, para conservar posiciones ganadas, o para alcanzar otras. Es bien sabido el hecho de que Gerardo Machado, ex dictador cubano, antiguo empleado de la filial habanera de la Electric Bond and Share, recibió de ésta apoyo financiero y "moral", a cambio de monopolios múltiples. En Costa Rica, un agente suyo hizo publicar en la Gaceta un decreto del Ejecutivo, que jamás había discutido ni aprobado este. En Colombia, sus representantes cohecharon concejos municipales en pleno. Y en Caracas, es un secreto a voces que Velasco y el Concejo que le ratificaron y prorrogaron el contrato, recibieron de la compañía pingüe paga.
Esta es la empresa que está en litigio con la Unión cvde. Sus métodos de acción internacionales -inclusive los que pone en práctica en su propio país de origen- son los que dejamos trazados, a grandes rasgos.
Por eso; y por la justicia intrínseca de las peticiones de los miembros de la Unión, la única actitud justa del Ejecutivo es la de hacerle sentir al trust eléctrico que la calidad de extranjero y de multimillonario no autoriza a ningún consorcio capitalista para irrespetar y desconocer sus obligaciones contractuales. Deber irrenunciable del Estado, a través de las autoridades del Trabajo, es hacerlas respetar.