Autor: Rómulo Betancourt
Título: Trascendencia de la labor correspondiente al Ministerio de Obras Públicas
Fecha de publicación: 09-03-1937
Publicación: Diario Ahora


En nota editorial de sábado 6, hizo este Diario una ligera referencia al papel preponderante que desempeña el Ministerio de Obras Públicas en la vida económica de la Nación. En efecto, no requiere un gran esfuerzo de observación para constatar este hecho pues se nos manifiesta de diversos modos. Las Oficinas del Despacho de Obras Públicas deben discernir y resolver sobre cuáles son las obras cuya realización es más urgente y cuáles son las que tendrán influencia decisiva en el desenvolvimiento de la economía nacional. Ha de tener por lo tanto, muy en cuenta, en la preparación de sus proyectos, no solamente el aspecto técnico desde el punto de vista de ingeniería, sino también, y de manera muy principal, la razón económica de los trabajos que se han de emprender, a fin de no emplear el dinero en obras superfluas.
El Gobierno Nacional vierte en la corriente de los negocios por medio del Ministerio de Obras Públicas una suma casi igual a la que produce la exportación de café y de cacao, y que casi alcanza la cifra de lo que invierten las empresas explotadoras de petróleo en salarios, sueldos y otros gastos. Desde este punto de enfoque, cobra el Departamento de Obras Públicas inusitada importancia, pues viene a constituir el medio más directo y más útil de que se puede valer el Gobierno para reintegrar a la circulación las sumas que ingresan al tesoro bajo el título de impuestos. Por las causas anotadas lo hemos citado entre los Departamentos que deben recibir una asignación preferente del próximo presupuesto.
El Ministerio de Obras Públicas adopta una política de buena lógica en la ejecución de las obras, su papel de distribuidor cobra cada día más importancia hasta convertirse en un regulador de demanda de brazos y, por ende, del precio del trabajo, del empleo y del desempleo.
Es cosa de todos conocida que en la actividad agrícola hay períodos en que esta industria necesita de mayor cantidad de brazos: una cosecha de café, las épocas de la siembra de frutos menores, etc., etc., y otros períodos de menor intensidad de trabajo cuando no requiere tanta gente a su servicio. Estas oscilaciones en la demanda de trabajo deben ser cuidadosamente observadas por el Ministerio de O.P. en las distintas regiones del país, así que pueda intensificar las actividades cuando el campo no pida trabajadores, evitando con esto el desempleo y la migración a las ciudades, y recortarlas cuando la agricultura requiera brazos para la recolección u otros fines, para no crearle situaciones embarazosas.Un plan de acción concienzudo del Despacho de Obras Públicas, debe contemplar esta particularidad que presenta el grado de ocupación en las diferentes regiones del país, y las necesidades de la agricultura con el propósito de armonizar los intereses de la industria con el trabajo y de impedir, hasta donde sea posible, el paro o exceso de demanda de brazos.