Entrevistadores: Sofía Ímber
Entrevistado: Carmen Montilla de Tinoco, pintora
Programa: Sólo con Sofía
Canal: Radio Caracas Televisión
Fecha: 17-03-1976

Sofía inició con los comerciales dedicados a los patrocinantes del programa: Instituto Nacional de Hipódromos y el Banco Industrial de Venezuela.
SI: Hoy tenemos una pintora: Carmen Montilla. Carmen de Tinoco, es nuestra invitada. El motivo de la invitación... pudieran ser muchos, entre ellos que una tiene derecho a tener una grata invitada con quien hablar, pero no se trata de eso, sino de que Carmen Montilla va a París, y de París a Barcelona, creo que en París es para recoger unos cuadros, para iniciar una exposición en Barcelona. Son cuadros diferentes a los que ella ha expuesto hasta ahora aquí, y tiene más de dos años que no expone en Venezuela, tres años, creo. Tres años es bastante en la vida de una creación. Arturo Uslar prologa el catálogo que Carmen va a hacer acompañar sus obras, y luego quizás iremos desmenuzando algunas frases de Arturo para comprender mejor la pintura de Carmen. La pintura de Carmen tiene la desventaja de que en blanco y negro... (Mostró el catalogo en cámara)... en televisión no sé si ustedes la logran ver muy bien, y me trajo transparencias, pero como no tenemos aquí el aparato para pasarlas, ni color, creo que es mejor mostrar lo que tienen en blanco y negro. Ella se titula "una de lo fantástico", yo no digo una pintora fantástica porque sería un adjetivo. ¿Qué es una pintora fantástica y por qué, más o menos, te logras canalizar hacia ese grupo de creadores?
CdT: Bueno, mira, te anticipo que yo no sé nada, o prácticamente nada de pintura. Yo pinto, pero yo no soy un crítico, ni muchísimo menos de arte.
SI: Esa es una gran ventaja. Me he fijado que los pintores que hablan mucho sobre su pintura y sobre la de los demás, terminan como inhibiéndose frente a su propia creación.
CdT: Exacto. Puede ser. Yo me he situado en ese campo que no es un campo, porque yo no sigo ninguna escuela, no puedo decir que hago figuración solamente, ni puedo decir que soy paisajista, ni puedo decir que cinética, ni mucho menos, sino que yo hago una figuración fantástica.
SI: Es lo imaginario.
CdT: Es lo irreal; entre más que todo como bien dice Arturo, dentro de un plano emotivo y onírico, y eso es lo que yo trasplanto a mis cuadros.
SI: ¿Cómo es el proceso? Porque Carmen soltó una palabra que tanto en literatura como en artes plásticas ha dado frutos muy importantes, y no sólo por sí, sino porque después, si se analiza y critica, puede dar. Ella soltó la palabra "onírico", es decir, la palabra sueño. Son muchos los poetas, los escritores que han trabajado con lo onírico, con lo que han soñado, y eso no significa que han soñado dormidos, sino que han soñado dormidos y despiertos, y que lo han traducido a la tela, digo tele, puede ser cualquier otra técnica, o al poema, o a la palabra escrita, bien cuentos, o bien como en el caso de Kafka, que es un escritor onírico por excelencia. El proceso de Carmen Tinoco, ¿cuál es?, ¿tú partes generalmente de una idea, de una leyenda, tú partes de la palabra hacia el color?
CdT: Mira, yo parte de todo lo que yo me imagino dentro de lo que es la vida del ser humano, su conflicto como ser humano, su vida trascendental, su vida anímica, para plasmarlo a través de la pintura, por eso mismo también dice Arturo, ya que tú has sido la que me has hecho esa maravillosa traducción al francés que te lo agradezco muchísimo y además, toda persona que habla francés me ha dicho que está extraordinariamente bien hecha y eso me importa mucho puesto que el catálogo va para Europa, partiendo de eso te digo que es un sentimiento y es casi como que uno cae en una especie de caos interno donde te vas sumergiendo y sumergiendo, y van saliendo en imágenes todos los pensamientos. Eso es mi pintura.
SI: Lo que tú dices lo podría decir cualquier persona inteligente, cualquier persona preocupada, sobre todo, en un mundo tan difícil y complicado como el que vivimos hoy en día. La persona inteligente se pone a pensar en lo que es el ser humano, todo lo que le espera al adolescente, uno tiene hijos, en este mundo actual, y hace pocos días, el secretario Kissinger decía que no descartaba la posibilidad de un arma atómica, inclusive, para equilibrar las cosas, lo cual podría producir de nuevo un Jerónimo Bosch, ¿no? Por el horror que despierta; pero eso lo podría decir cualquier persona inteligente, lo podría decir un filósofo, lo podría decir un escritor, pero un pintor es una cosa distinta. Entonces, tú tienes que partir de esa idea, pero tú antes de todas maneras pintabas antes de pintar estas cosas. Tú has pintado toda tu vida, has sido alumna de la escuela de Bellas Artes aquí y en Argentina...
CdT: Yo, profesionalmente, estoy trabajando en la pintura desde hace quince años, antes lo hacía un poco como amateur, y un poco a la búsqueda de lanzar mis propias angustias y mis propias sensaciones en algo, hice teatro...
SI: No lo sabía.
CdT: Sí, yo hice teatro en Argentina, e incluso me ofrecieron trabajar en el cine y me hicieron muchas pruebas, pero yo me puse muy nerviosa, estaba muy joven, y quizás no...
SI: No sentías que ésa era tu vía...
CdT: Claro. Me movía dentro de un grupo de gente muy intelectual, y qué sé yo, y varios amigos me decían: "Tú realmente, y tu personalidad, y todo lo que sientes y hablas es más hacia la pintura". Entonces yo empecé, como te digo como amateur, y después me entusiasmé y comencé seriamente a estudiar artes plásticas en Argentina, y expuse por primera vez allá en un salón que se llamaba, porque ya no existe, Salón de Jóvenes Latinoamericanos, entre los cuales entraban todos los extranjeros de menos de 30 años que vivieran en Argentina, en Buenos Aires.
SI: Otra palabra que acabas de soltar y que lleva a una pregunta obligatoria: Pintores latinos. Tú acabas de pasar un largo tiempo trabajando en París, tienes tu estudio montado en París. ¿Tú crees que verdaderamente se puede hablar de arte latino, de pintores latinos, es eso una verdad, o es uno de los tantos mitos que se crean?
CdT: No. Yo creo que el movimiento latinoamericano es muy real.
SI: No digo que no hay un movimiento, que no haya pintores importantes, porque por ejemplo Botero, Soto, Cruz Diez, si pintan así, porque no nacieron en tal parte o en tal otra...
CdT: No. Yo diría que yo podría haber nacido en Estocolmo o en Bulgaria, o en el África, y pintaría lo mismo, y me hubiera canalizado hacia eso porque, de acuerdo a mi personalidad, es lo que yo siento.
SI: Hablando ya un poco como crítico, al ver el catálogo, yo diría que Carmen ha cambiado unas tonalidades grises, ocres, muy oscuras, por unos tonos muy vivos y muy alegres. Estos son rojos (mostró el catálogo, su portada), azules, son cuadros múltiples con una cantidad de figuras, pero si aquellas figuras eran mucho más traumatizadas, ésas son figuras que a la vez no puedo decir que sean muy eufóricas, que tienen máscaras, que no muestran su cara totalmente, pero que no son figuras de horror, sino que son figuras más reales, las otras eran como unas figuras más de horror, de un mundo de horror, y éstas son más irreales y son, a la vez, carnavalescas y aún un poco alegres.
CdT: Yo no las encuentro alegres, pero claro, ese cuadro justamente, éste de la portada...
SI: ¿Qué tamaño tiene?
CdT: Tiene 2 por 2.25 mts.
SI: Entonces son telas muy grandes...
CdT: No, últimamente he empezado a trabajar en telas muy pequeñas. Nunca había trabajado en telas pequeñas, pero para esta exposición llevo telas pequeñas.
SI: ¿Por qué telas pequeñas?
CdT: Porque, mira: Primero, los espacios vitales de las galerías europeas son mínimos. En general las galerías se interesan mucho de que tú les lleves, no hablemos ya de la parte comercial sino de la parte de espacio, por lo menos que les lleves tres obras grandes pero que las demás, sean más o menos pequeñas. Yo llamo pequeñas de un metro.
SI: Tú puedes decir eso porque eres pintora, pero yo te puedo decir que aún desde el punto de vista económico y del espacio, los artistas están trabajando en búsquedas que son increíblemente grandes, que van en un sentido contrario a la compresión de la gente. Porque la gente, sobre todo en las ciudades, vive cada vez en espacios más pequeños, y por otra parte, los pintores desean que los compren porque es una manera de comunicarse con ellos, y muchos tienen que vivir de su arte, y es mucho más fácil, mucho más económico y mucho más viable comprar una obra pequeña que una obra grande.
CdT: Ahora, en cuanto al trabajo, es mucho más complicado trabajar en pequeño que trabajar en grande.
SI: Por la realización de los múltiples.
CdT: Esta portada de mi catálogo es mi primer cuadro de hace tres años...
SI: Todos los cuadros actuales son de colores mucho más vivos que los de la época anterior de Carmen.
CdT: Sí, claro.
SI: ¿Qué te aporta París desde el punto de vista plástico? Cuando llega a París, una pintora venezolana y argentina, en el sentido de que has trabajado muchos años en Argentina, ¿el hecho de encontrarse con todos los movimientos que están en ese lugar?
CdT: Me aporta una cosa maravillosa para mí, que es la libertad. Allá soy un artista, no tengo absolutamente obligaciones de ninguna clase, sociales, políticas, ambientales, nada, soy un artista y así mismo fue como se me dio un premio. Mandé mi obra y mi obra gustó, sin saber si era hombre o mujer, si era fea o bonita, rubia o morena... Eso me parece maravilloso.
SI: ¿Dónde fue tu premio?
CdT: Fue en la Bienal de Cannes.
SI: Ésa es una Bienal que cada vez ha adquirido mayor importancia, y es extraordinario eso que dice Carmen, el hecho de haber enviado su obra, que no la conocían, que no tenía nombre ni apellido, ni sexo, ni rubia o morena, es muy importante, porque generalmente, al menos con los premios de aquí y en otras partes, que uno sabe de antemano quiénes serán los galardonados. En Barcelona va a ser la exposición en la Sala Gaudí, ¿cuánto tiempo expondrás allí?
CdT: Ellos de ordinario ponen dos semanas, y si les ha ido muy bien en cuanto a la acogida del público, ponen una semana más. Ellos calculan que entre el público -sin contar los estudiantes de arte y los universitarios- la galería debe ser visitada por lo menos por dos mil personas.
SI: Que es una barbaridad para una galería, aunque no sea así para un museo, porque es medio día de un museo aquí, pero para una galería es mucho.
CdT: Sí, desde luego.
SI: ¿Por qué tú llamas a tu exposición "Selva Interior"?
CdT: Justamente Sofía, porque yo en estos últimos años he tratado de agarrar un sujeto, un tema, y entonces sobre ese tema venir desarrollando, y desarrollando y desarrollando toda una idea.
SI: ¿Entonces, tú crees que inclusive esos cuadros deberían estar expuestos numéricamente porque desde el punto de vista de realización plástica cuentan una historia? De cierta manera, equis historia.
CdT: Ese cuadro de la portada, tiene muchísimo más color que lo que están adentro del catálogo y ha sido sencillamente por un proceso interior mío. He ido haciendo más sutil el cuadro, aunque es más complicado en mi concepto, porque tiene más veladuras, tiene más sujetos que no son relevantes, sino que están ahí metidos y que es difícil verlos.
SI: Después de Barcelona, ¿para dónde va la exposición?
CdT: En principio tendría que ir a París, pero todavía no he clausurado la galería que tengo en París, estoy en desacuerdo con el color en que la pintó el propietario, las paredes.
SI: Tú debes ir con una brocha y echarle una mano de pintura.
CdT: Yo no puedo exponer mi pintura en una galería que no sea totalmente y prácticamente como una iglesia.
SI: Tienen que ser así las galerías.
CdT: Sí, tienen que ser así, yo las veo así como una iglesia, como una cosa totalmente sobria, tranquila.
SI: ¿Piensas exponer en Caracas, después de París?
CdT: Después de... fíjate, mi aspiración es hacer una exposición más en Europa y tengo una en Suiza en octubre.
SI: Carmen también ha hecho unas técnicas nuevas, nuevas para ella porque no había incursionado en ese campo, que son las litografías. ¿Qué significó para ti la litografía?
CdT: ¡Maravillosa!... Y voy a tratar de hacerlo aquí en Caracas.
SI: ¿Te gusta?
CdT: Sí, y sobre todo me parece que hay un proceso de técnica que te permite ir más lentamente en la cuestión imaginativa para adquirir una cantidad de pequeños trucos.
SI: ¿Cómo te parecía la pintura venezolana cuando estabas en París, confrontada con las grandes corrientes internacionales y francesas?
CdT: Naturalmente la corriente más fuerte venezolana y latinoamericana es la cinética y la óptica, en París, fuera de esos grandes que has nombrado: Botero, Obregón, todos esos otros que no se han metido en esa corriente. Entonces, en general se habla de los argentinos y de los venezolanos como cinéticos, a los franceses en sí no los considero a la altura del movimiento surrealista ni del movimiento figurativo.
SI: ¿Cómo va el libro que estás escribiendo?
CdT: Eso es para cuando yo sobreviva a mis 80 años...
SI: Yo sé que lo estás escribiendo, lo que pasa es que no lo quieres decir...
CdT: No, no. Son unas memorias que pienso publicar, yo todos los días escribo algo, o sea, un fragmento de un sueño.
SI: A ti te llaman por teléfono, y desde la mañana logras una cosa que nadie logra, que es decir: La señora está en su taller. ¿Cuántas horas al día trabajas tú?
CdT: Es que es verdad. Me levanto a un cuarto para las siete, trato de tener una gran disciplina en mi trabajo, y en todo el sentido de mi vida. Yo trabajo, cuando estoy preparando una exposición, comienzo por trabajar ocho horas, últimamente trabajo cinco o trabajo todos los días menos los sábados y domingos.
SI: Tu aspiración máxima como pintora ¿sería qué?, ¿qué te gustaría lograr para sentirte verdaderamente realizada como pintora?
CdT: Que no se mezcle jamás mi parte femenina y mi parte física con la pintura. Para mí es indispensable, y por eso me encanta mandar mi obra, inclusive el catálogo no dice Carmen, sino Montilla, de manera que no mezclen. Porque, claro, los hombres son susceptibles a las mujeres, y las mujeres son envidiosas de los hombres.
SI: Es una buena verdad, concluyó Sofía riendo. Hasta luego, Carmen, que tengas mucho éxito en Barcelona, que logres que el hombre de París pinte las paredes del color que tú quieres, que triunfes en Suiza, y que luego esta exposición venga a Venezuela.